Estudiantes llevan nueve días caminando de Concepción a Santiago, mañana llegarían a Stgo.

Su próxima parada es Buín, solo restan 100 kilómetros para llegar a Santiago y en el camino ya fueron reprimidos por carabineros, quienes con sus motos hostigaron a los jóvenes en su caminata por una educación pública, gratuita y de calidad.

En Rancagua y con próximo paradero en Buin, comuna que antecederá el ingreso pleno a Santiago, se encuentran los estudiantes que desde el domingo 25 de septiembre caminan exigiendo educación pública, gratuita y de calidad. Sólo restan 100 kilómetros.

Sin embargo, los jóvenes denunciaron represión de Carabineros y más de una docena de jóvenes lesionados.

“Lo bueno es que somos más personas, más de 150. Lo malo es que Carabineros ya dejó de ser custodia, escolta de nosotros”, comentó Michael Ramos, estudiante secundario y vocero del movimiento. Y es que en la última jornada un grupo de niños y jóvenes que caminaban pacíficamente portando una bandera chilena de 18 metros, fueron hostigados por carabineros que sin provocación alguna los increparon “tirándonos las motos encima”, comentó Eduardo Hernández, uno de los estudiantes. 

El hecho no pasó a mayores, pero sí provocó molestia entre los alumnos secundarios y universitarios que caminan, los que se mostraron extrañados por el actuar de carabineros.

“Después de ese hecho puntual, hablamos con el Mayor y continuamos caminando, con más fuerza, energía y  sobretodo con mayor convicción de que tenemos que llegar a La Moneda y seguir invitando a los padres, apoderados, profesores, trabajadores y alumnos a que sigan apoyando e incorporando a esta caminata, que busca fortalecer el movimiento estudiantil en pos de una educación de calidad y gratuita para todos”, señaló Ramos.

Problemas en los pies

Por otro lado, la salud no ha sido la óptima para todos. Michael comentó que “en el camino se han visto afectadas alrededor de 15 jóvenes que han tenido que ser atendidos en centros de salud, siendo las principales causas: heridas en las piernas y tendinitis. Por eso también hemos decidido caminar un poco más lento, con el fin de no sobreexigirles a los compañeros que han tenido problemas físicos. Vamos caminando lento, pero seguros de que llegaremos a Santiago, pues ni la lluvia ni el calor ni el dolor de piernas nos ha detenido”.

La última estancia nocturna que tuvieron los estudiantes de la marcha por la educación fue el Liceo Óscar Castro, de Rancagua. Hoy esperan llegar a la localidad de Buin, para, finalmente, mañana miércoles entrar a la capital.

PRENSA GRÁFICA CALLEJERA
Francisca E.