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En una entrevista exclusiva con un medio web (Verdad Ahora), el nuevo rostro del periodismo independiente, Patricio Mery Bell, reveló los secretos de su carrera profesional y política.
El periodista chileno que actualmente tiene siete procesos judiciales abiertos “por investigar a los poderosos”, brindó detalles sobre su juventud, su temprana asesoría a los Luksic, sus choques con el establishment del Partido Socialista, su rol en la campaña de Marco Enriquez Ominami, su relación con el Grupo Errázuriz, sus recientes hallazgos que ponen en jaque al Alto Mando de Carabineros, y mucho más. “Si voy a hablar de ciertos temas en esta entrevista, va a ser primera y última vez”, expresa Patricio Mery, socio y director de Panoramas News. “Uno entiende que en la vida te van a atacar tus enemigos, tus adversarios, pero cuanto tus amigos te traicionan, la gente de tu propio sector te traiciona, es muy terrible, es muy dramático.
Me recuerda mucho lo que debe haber vivido harta gente durante el golpe de Estado”. Los inicios de su carrera El entrevistado dice haber empezado su vida política a los 14 años, cuando fue vicepresidente del Centro de Alumnos del Instituto Nacional. “Me acuerdo haber sido el vicepresidente más joven de esa época”, dice: “Me puse a militar en el Partido Socialista a los 18 años. Tuve todos los cargos que se podían tener en el partido. Entre ellos fui jefe de los Universitarios Socialistas, de la Dirección Nacional Universitaria de las Juventudes Socialistas (DNU) y fui dos veces miembro del Comité Central Nacional del PS”.
El periodista chileno que actualmente tiene siete procesos judiciales abiertos “por investigar a los poderosos”, brindó detalles sobre su juventud, su temprana asesoría a los Luksic, sus choques con el establishment del Partido Socialista, su rol en la campaña de Marco Enriquez Ominami, su relación con el Grupo Errázuriz, sus recientes hallazgos que ponen en jaque al Alto Mando de Carabineros, y mucho más. “Si voy a hablar de ciertos temas en esta entrevista, va a ser primera y última vez”, expresa Patricio Mery, socio y director de Panoramas News. “Uno entiende que en la vida te van a atacar tus enemigos, tus adversarios, pero cuanto tus amigos te traicionan, la gente de tu propio sector te traiciona, es muy terrible, es muy dramático.
Me recuerda mucho lo que debe haber vivido harta gente durante el golpe de Estado”. Los inicios de su carrera El entrevistado dice haber empezado su vida política a los 14 años, cuando fue vicepresidente del Centro de Alumnos del Instituto Nacional. “Me acuerdo haber sido el vicepresidente más joven de esa época”, dice: “Me puse a militar en el Partido Socialista a los 18 años. Tuve todos los cargos que se podían tener en el partido. Entre ellos fui jefe de los Universitarios Socialistas, de la Dirección Nacional Universitaria de las Juventudes Socialistas (DNU) y fui dos veces miembro del Comité Central Nacional del PS”.
“Mi primer trabajo fue en una empresa de comunicaciones que se llamaba Delta Comunicaciones, que asesoraba a los Luksic, a la mina Los Pelambres, una aerolínea, una serie de empresas.” Dice que llegó ahí “de suerte” haciendo su práctica en una empresa de comunicación estratégica, un área del periodismo con la que mantenía afinidad. “Hice la práctica, terminé la práctica y me quedé trabajando. Ganaba 200 lucas mensuales. Me sacaban la cresta. Tenía que llegar a las 7 y media de la mañana, hacer informes de prensa, una pega bien complicada”. “Cuando el gobierno critica a algunos empresarios, a mí me da risa”, indica el periodista, “porque yo vi a los Luksic gastar y comprar a toda la gente de la Cuarta Región, de la comunidad de Caimanes, para aprobar el Tranque de Relaves El Mauro. Uno se da cuenta que al final Chile es un país que está gobernado por sus propios dueños, y esos dueños tienen una regla: no tocarse entre ellos.” “Cuando hay una ministra del Trabajo que no paga sus impuestos como Evelyn Matthei, un presidente (Piñera) que quebró un banco como el Banco de Talca, que estuvo prófugo de la justicia, ministros que colaboraron con Pinochet, que fueron jóvenes de Chacarilla, tú te empiezas a dar cuenta que aquí hay una sagrada familia. Está vinculada por los políticos, por empresarios, que a veces son los mismos, los políticos y empresarios, entonces se genera una red de corrupción en el fondo e influencias que son bien malignas”. “Luksic, Edwards y Saieh van a estar siempre con el gobierno de turno, que les mantenga el sistema neoliberal y que no se los toque. Es un sistema tremendamente injusto y que de libre mercado no tiene nada, porque para tener libre mercado necesitas libertad de competencia, y para tener libertad de competencia necesitas igualdad de oportunidades. No hay igualdad de oportunidades, por lo tanto no hay libre competencia, ni libre mercado. Las prisiones del Sename Después de trabajar unos años como asesor para el rubro empresarial, Mery transita por diversos municipios, como la Municipalidad de San Miguel y la Municipalidad de San Joaquín, además de ejercer un cargo en la Secretaría Regional de Planificación cuando Marcelo Trivelli era intendente. El profesional también recuerda haber estado un año en el programa Chile Solidario, pero luego admite haber pasado una de sus peores experiencias laborales en el Sename. “Me di cuenta que el aparato público era una burocracia absoluta donde les importaba nada lo que le pasaba a los cabros chicos. Había gente incompetente, inepta, que simplemente no tenía ninguna vocación de servicio por esos niños, que son vulnerados en sus derechos”, declara Patricio. “Tú te das cuenta ahí que la máquina del sistema está pensada para perpetuar la desigualdad, entonces los cabros chicos entran al Sename y salen peor de lo que entraron.” “Me tocó vivir situaciones bien cruentas, bien duras. Entrar a centros del Sename donde estaban las niñas detenidas. Porque están detenidas, están presas. Uno puede ocupar cualquier eufemismo, pero no pueden salir. Adentro hay unas violaciones horrendas, maltratos por parte de los tíos”. Mery cuenta que la mayoría de las casas externas del Sename están en manos de la Iglesia Católica, sirviendo además como el “botín de oro” de la Democracia Cristiana. “Tú leías los informes y decía: ‘mire, las niñas están súper bien, pero les falta un poco más de vocación espiritual, por eso les pedimos 5 millones de pesos para construir una capilla’. Y tu ibas a hacer una fiscalización a ese lugar y te dabas cuenta de que las niñas no tenían ducha, ni toallas, las camas eran asquerosas”. “Tuve muchos problemas con la jefatura, principalmente con la Democracia Cristiana que siempre usó el Sename como su botín de oro. Desde ahí repartían todas las pegas. O sea, tú eras demócrata cristiano o no entrabas. En el caso mío entré por un tema técnico donde una amiga mía tuvo un cargo relativamente importante, y también la terminaron sacando. Pero ahí conocí la maquinaria brutal de la Concertación.” ¿Qué fue lo que gatilló su retiro del Sename? Patricio relata: “Me acuerdo que yo era jefe de comunicaciones entre comillas, porque era una jefatura sin ninguna posibilidad de hacer cambios, y un día hablo con la esposa de Lorenzini que trabajaba ahí y le pido que empiece a trabajar, porque hacía media jornada. ¡Y me acusó con el director nacional! La directora nacional de esa época terminó casi tomando sanciones conmigo porque yo le pedía que trabajara.” Los jóvenes en los partidos políticos “Yo siempre fui díscolo y crítico de la Concertación, nunca me sentí cómodo siendo militante de la Concertación. Yo me sentía más socialista que concertacionista, entonces mis choques fueron permanentes porque yo sentía que la Concertación tenía que ir más rápido, hacer menos negocios con la derecha política y económica de los conservadores. Veía mucha corrupción interna, que los jóvenes se dedicaban simplemente a llevar los maletines de los viejos.” “Conozco el caso de Pablo Gutiérrez, un asesor de José Miguel Insulza, que nunca ha tenido otro trabajo que no sea llevarle el maletín a José Miguel Insulza. Desde que salió de la universidad, que entró al Ministerio del Interior, hasta hoy día que está en la OEA. Un operador político de primera línea. Entonces cuanto tú te encuentras con esa gente y lo único a lo que la juventud de los partidos está aspirando es a llevar el maletín o terminar siendo subsecretario o jefe de servicios, eso no era para mí. Yo sentía que estaba en política porque quería transformar Chile, quería transformar el mundo. Sigo pensando igual.” “Los partidos políticos siempre utilizan a los jóvenes como carne de cañón. Los agarran, los tiran a la pelea, los terminan usando. Uno se cree el cuento. Te gastas la plata que no tienes, te ganas las chuchás de la gente. Porque te dicen: ‘¡Ustedes, los políticos!’ Y tú dices: ‘Señora, yo tengo 26 años, 27 años, y la verdad no tengo ninguna responsabilidad en algún tema en particular’”. Candidato a concejal Después de integrar un equipo multidisciplinario en la Asociación Chilena de Municipios, en medio de la discusión sobre la modernización de las municipalidades – “la gran deuda que tiene Chile”, comenta el entrevistado – Mery decide aceptar el ofrecimiento del Partido Socialista y ser candidato a concejal por Estación Central. “Renuncio a mi pega en la Asociación Chilena de Municipios y me voy a la pelea, el todo por el todo. Siempre me he caracterizado por eso. Cuando me meto en algo, lo hago hasta el final”, enfatiza el periodista. Y admite: “Farandulicé un poco mi carrera periodística, no tendría por qué haberlo hecho. Yo creo que fue un error. Terminé peleando con un modelo concejal de la UDI (Patricio Laguna) que terminó acusado de golpear a su mujer, de patearla en el suelo, no sé qué más. Y empecé a ir a los programas de farándula y lo criticaba. Pero al final caí en el juego de él y creo que fue un gran error, porque uno tiene que hacer su campaña sobre la base de ideas y lugares donde uno conozca, y no sobre la base de la descalificación del otro. Fue un error estratégico.” “Pero la experiencia me sirvió. Conocí Estación Central profundamente. Supe de la realidad misma de la gente, de cómo se vive con una pensión miserable (…) Uno cree que hace cosas muy importantes, pero al final no estás haciendo nada por la gente. Pasas todo el día en reuniones, en la chimuchina, la pelea chica, el Partido. No es muy agradable.” Patricio cuenta que compitió contra más de 50 candidatos, 3 de ellos del mismo Partido Socialista. “Yo tenía dos candidatos a alcalde: Hugo Gutiérrez y Santander, que era de la Democracia Cristiana. Y yo no sabía a quién apoyar. Yo siempre apoyaba al Hugo por una afinidad más política, pero el Partido Comunista estaba fuera de la Concertación. Entonces al final uno terminaba como el jamón del sándwich”. “Yo me acuerdo una vez que en la Villa Portales me fueron a echar a combos de la campaña, a combos, los mismos socialistas. ¿Cachai lo que significa eso? Tus propios compañeros. Hoy yo estoy convencido de que si hubiese un golpe de Estado, los socialistas serían los primeros en entregar a sus compañeros para que la CNI o la DNI los torturara. Estoy convencido, porque son intrínsecamente traidores”. Las infidencias de la campaña de MEO Luego de perder la elección, el periodista comienza a trabajar en una empresa de comunicación estratégica llamada Entre Líneas, propiedad de Camilo Feres. “Paradójicamente (Camilo) era una de las personas que más me ayudó en la vida, pero que también me traicionó más fuerte”, revela Mery. “Así conozco a Carlos y Marco (Ominami) durante las campañas internas del Partido Socialista”. Su gran sintonía con Carlos Ominami lleva al periodista a fundar la campaña de MEO. “Yo me jugué el pellejo en la campaña de Marco Enriquez”, señala, revelando que las presiones de Julio Palestro del Partido Socialista, y un alcalde de la DC, terminaron expulsándolo de su trabajo en la Asociación Chilena de Municipios, simplemente por manifestar su apoyo a MEO. “Marco no movió ni un solo dedo para defenderme. Ni uno sólo. Cuando yo trabajaba en su campaña, me pagaba 200 lucas. O sea, yo lo hacía por convicciones”, enfatiza. El ahora director de Panorama News señala que la campaña que apoyó “puso en jaque al poder”. “Dijimos ‘queremos transformar a la Concertación en algo mayor, en una nueva mayoría progresista que se haga cargo de sus silencios, de proyectar el futuro de la centroizquierda para Chile’. Pero se terminó utilizando por la derecha para que triunfara Sebastián Piñera”. “Cuando uno entra en política, entra como con la sed de poder insaciable”, declara Patricio. “El que te diga lo contrario es mentira. Y en esa sed, uno empieza a acercarse a los poderosos, a buscarlos, a estar cerca siempre de los príncipes. Pero el error es que ellos nunca te van a ver como un igual, te van a ver siempre como un goma, como un secretario, como un instrumento, como un preservativo que pueden usar y botar. Y eso fue lo que Marco hizo conmigo.” “Hoy no hay relación (con Marco Enriquez). Es una relación que no existe. No es buena ni mala. No tengo odio, fue un tema muy personal. Vivimos cosas muy intensas que nunca voy a contar. Intensas, intensas. Cosas de amistades profundas. Entonces creo que cuando llegue el momento a lo mejor nos vamos a sentar a conversar, y no sé si él tenga ganas, porque está en una parada tan de súper estrella y salvador del mundo que yo creo que es difícil conversar con alguien así, que cree que todo pasa por él… y como yo también soy así, es difícil que dos personas con esa personalidad logren ponerse de acuerdo en algo o convivir.” Después de todo lo anterior, Mery todavía mantiene su fe en Marco. “Él puede llegar a ser presidente. No sé cuándo, pero puede llegar a serlo. Le falta también un poquito de humildad. Escuchar más, volver a reconstruir ciertos lazos, principalmente con nosotros que dimos tanto por un proyecto futuro que no tenía que ver con él, era un proyecto colectivo”. Daniel Platovsky y el cierre de La Nación “Me la jugué toda por el todo, y lo sacrifiqué todo. A diferencia de otros, que a través de la campaña de Marco terminaron siendo asesores en la oficina de Cristina Bitar, agarraron pega en el gobierno, armaron consultoras, se aseguraron, o cuánta plata a lo mejor, o cuánto lucraron con la campaña de Marco. Anda a saber tú, sin que supiera el propio Marco.” Al ganar Sebastián Piñera las elecciones presidenciales, y aceptar la derrota de MEO, Patricio Mery busca espacios en los medios y comienza a escribir columnas en La Nación Domingo. Hoy admite que sus ingresos bajaron radicalmente y que estuvo casi en la bancarrota. “Me voy a una situación financiera de quiebra, empiezo a abrir tarjetas de crédito (…) No hubo nadie que me apoyara, absolutamente nadie. Sentí la soledad absoluta, por lo tanto yo no tengo que darle explicación a nadie de lo que hago.” El 11 de marzo de 2010, Mery es despedido de La Nación. El periodista hoy revela que fue expulsado por su editora, Ana Verónica Peña, a solicitud de la entonces vocera Ena Von Baer. La decisión de cerrar el periódico también fue tomada con el aval de su dueño, Daniel Platovsky. “Platovsky es como el pistolero del presidente Piñera. Lo mandan a hacer los asesinatos selectivos. Entonces su misión fue matar La Nación”, sentencia. “El equipo directivo que se queda en La Nación empieza a hacer cosas que son bastante cuestionables desde el punto de vista de la ética. Una de ellas es perseguir a otros periodistas que eran de izquierda, pro Concertación, o incluso sin ningún color político, pero que no eran de gusto de la derecha. Acuérdate que Piñera había dicho en campaña que iba a cerrar La Nación. Es lamentable que este gobierno haya partido vulnerando la libertad de prensa.” ¿Cuál fue el objetivo de cerrar La Nación? El profesional responde: “La Nación tenía por fin ampliar el mercado para otros medios (…) El cierre de La Nación significa que el Estado ya no pone plata en La Nación, sino que empieza a ponerla en el duopolio, que es como el sistema binominal del periodismo, entre Copesa y El Mercurio. Esto fue un plan. Aquí hubo un plan de empezar a terminar con la libertad de expresión y la libertad de prensa.” “En lo particular, a mí nunca me gustó La Nación”, prosigue, “lo encontraba un diario fome, así como la Concertación. Era el reflejo mismo de la Concertación: un diario aburrido, latero, puro cahuín. Pero voy a defender siempre que existan medios de comunicación. Además La Nación tiene una historia, que fue privatizada en el gobierno de Carlos Ibañez del Campo, de mala manera. Se le quita a Eliodoro Yañez de forma fraudulenta y La Nación era un patrimonio de todos los chilenos. Es como si tú terminaras privatizando Televisión Nacional o un día se cerrara”. Nace Panoramas News “Me echa Ana Verónica Peña y empiezo a peregrinar por el periodismo, sin nada que hacer, con una situación muy complicada, muy angustiado. Y me fui al suelo, lo que es al suelo”, recuerda. “Pero yo no vengo de la generación de los llorones, no vengo de la generación del miedo. Vengo de la generación de los valientes, de la generación de los emprendedores, de los que son capaces de pararse de igual a igual frente a cualquier persona. Y gracias a esa voluntad, que creo que está inculcada en mi familia, con tíos torturados que sobrevivieron a torturas, con papás perseguidos, no tenía otra opción que ser yo mismo. Y creo que ahí viene el cambio, porque de haber sido el goma de los políticos, de haber sido el que siempre estuvo detrás del poder, empiezo a renegar del poder y empiezo con una crisis vocacional muy potente, empiezo a pensar que yo soy periodista y por primera vez, después de casi diez, doce años de trabajo, empiezo a cuestionar la lógica del periodismo.” Durante esta etapa de su vida, Mery comienza a escribir para UPI y medios como El Periodista, cuyo espacio hoy agradece a Francisco Martorell. “Lo hacía para mantenerme vigente, para no estar aburrido en la casa viendo monitos o jugando Play Station”, comenta. “Pero no vivía, me estaba comiendo las tarjetas de crédito. Nadie me ayudaba. Golpeaba puertas, nadie contestaba. Era el más odiado por la Concertación, era el más odiado por la derecha, era el más de odiado por todos. Me había peleado con todo el mundo por decir las cosas como quería”. Y fue cuando entonces dijo “voy a fundar un diario”. El periodista relata: “Fui al banco y pedí un crédito de 12 millones de pesos. Toda la gente que yo junté en el proyecto me dijo que no, que era imposible, que en Chile no se podía hacer un medio independiente, que la figura que yo estaba vendiendo era una locura”. Patricio Mery saca un ejemplar de Panorama News y nos lo muestra: “Aquí está, tú lo estás viendo después de dos años. Panoramas News ha marcado la agenda, ha hecho un buen periodismo de investigación y entretenido a la vez”. “Yo mismo pagaba las impresiones totalmente, ni siquiera tenía una empresa detrás, lo más artesanal posible. Por eso cuando la derecha habla de emprendimiento, de libre mercado, de competencia, de igualdad, yo me río, porque soy el ejemplo del hombre que se hace a sí mismo.” “Panoramas News lo hacíamos en mi departamento. Una diseñadora y un notebook. Ni siquiera teníamos un PC para hacer el diario. Y con mi internet inalámbrico. Así parte Panoramas News. Sin el apoyo de nadie. Lo hacíamos dos personas, con la ayuda de otro más que es Sergio Cárdenas, que ha estado presente desde el principio y hoy es subdirector. Muy distinto a cómo parte el The Clinic por ejemplo, que parte financiado por Lagos (…) Respeto lo que hizo en su época el The Clinic, pero hoy día es como un diarito que está asumido por el sistema. Que no hace daño, que es divertido, que lo puede leer desde el Opus Dei hasta el más ultrón y todos se ríen. Pero no genera periodismo de investigación, no causa impacto, no pone en quiebre ni pone en tensión lo que estamos viendo, el statu quo”. Patricio Mery narra una anécdota: “Una vez el diario tenía que llegar a las 4 de la tarde y llegó a las 11 de la noche. Me quedé acachado con 25.000 periódicos en un departamento. Tú no podías caminar por el departamento. Yo salí a distribuir el diario. Estaba en Plaza de Armas distribuyéndolo y vienen los grandes jerarcas del Partido Socialista. Muchos no me saludaron porque les dio vergüenza, porque yo estaba distribuyendo el diario. Hoy día esos mismos me llaman para salir en las portadas”. Investigando a los poderosos Al fundar el diario que hoy dirige, el periodista dice que haber tomado una opción ética: “Dije ‘si voy a hacer periodismo de investigación y periodismo informativo, voy a hacer periodismo de verdad, me voy a meter en la pata de los caballos cueste lo que cueste’” (…) He optado por tener un diario que sea crítico, que no tiene un color político, que es independiente y pluralista. Nosotros le hemos sacado la cresta a Camilo Escalona por ser explotador laboral, a la Evelyn Matthei por no cumplir con sus impuestos, al alcalde de Maule que lo pillamos conduciendo en estado de ebriedad con un travesti, a Platovsky por haber mentido en el tema de La Nación Domingo”. “Hemos marcado la agenda con el tema de Carabineros. Y, perdóname que te lo diga, pero todos los generales que nosotros hemos cuestionado fueron nombrados durante la época de la Concertación. Ni siquiera son de derecha. Entonces quien piense que nosotros tenemos una animadversión en contra de la derecha, está equivocado. Yo personalmente soy de izquierda”, distingue el entrevistado. En 2011, Patricio Mery renuncia al Partido Socialista luego de fuertes choques con la dirigencia. En este contexto, el profesional destaca: “Cuando fuimos a denunciar a la Comisión de Derechos Humanos las escuchas telefónicas ilegales, que es un escándalo, donde la Dipolcar realiza escuchas a parlamentarios y embajadores, solicitadas por el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, el único diputado que defendió a Carabineros fue un diputado socialista”. Patricio revela que Fidel Espinoza (PS), parlamentario que puso en cuestionamiento sus denuncias contra el Alto Mando de Carabineros, lo llamó hace un par de días para pedirle disculpas. “El director general de Inteligencia, Bruno Villalobos, nos acusó por vulnerar la Ley de Inteligencia”, continúa el periodista. “Nosotros fuimos como los criminales más buscados de Chile, junto con el abogado Rubén Jerez, Claudio Cofré y el ex carabinero Esteban Infante. La justicia dijo que éramos absolutamente inocentes”. Mery saca a relucir entonces un expediente de más de cien páginas: “En el sumario que tú estás viendo en este instante, que tiene casi 200 páginas, Bruno Villalobos acepta que existen los equipos de escuchas telefónicas ilegales, por lo cual nosotros vamos a tomar medidas legales al más breve plazo en marzo.” “No sé qué puede ir de las querellas por injurias y calumnias, pero uno se empieza a preguntar ciertas cosas cuando entra al periodismo de investigación: ¿Por qué hay intocables? ¿Por qué los otros medios toman una situación que es como durante la dictadura, con la autocensura? ¿Por qué los temas de Panoramas News los tapan? ¿A quién están cuidando? ¿Por qué le dan más cabida a CIPER cuando saca un golpe noticioso de menor envergadura, con muchos menos antecedentes que los que saca Panoramas News, que a nosotros? Yo creo que detrás de eso hay cobardía, hay una colusión de los medios.” “Tengo siete procesos judiciales abiertos en este momento por investigar a los poderosos… que es la pega nuestra, ¿no? ¿Para qué estudiaste periodismo, entonces? ¿Para hacer notitas idiotas para la farándula? No creo. Sin desprestigiar, porque a veces no tienes opción para elegir dónde trabajar. Yo también trabajé en farándula, me compré el cuento, pero cuando uno entra y se cree el cuento de ser periodista, tú tienes que estar dispuesto a salir con las patas para adelante”. Patricio Mery comenta que ha sido víctima de persecuciones, seis detenciones, golpes y que la última vez detenido permaneció “cuatro horas esposado como un delincuente común por estar filmando una manifestación”. La relación con el Grupo Errázuriz y el secreto de Evelyn Matthei “Uno de los temas más complicados que me ha tocado vivir, y más injusto además, es mi relación con el Grupo Errázuriz y Fra Fra”, declara el periodista y se detiene. “Lo primero que quiero decir, es que nunca más voy a volver a hablar de esto”. “Te voy a contar una anécdota. Hay una periodista de El Ciudadano que me sacaba la cresta en Twitter por trabajar con Fra Fra. Me sacaba la cresta. Y un día nos juntamos a conversar y yo le conté esta misma historia. Y me dijo: ‘Pero tú tienes que contar esto’. Yo le dije: ‘¿Por qué? ¿A quién tengo que dar explicaciones? ¿Cuánta gente estuvo dispuesta a ayudarme, a darme un trabajo decente, digno y honesto como el que tengo hoy?’. ¿Y por qué voy a hablar de esto hoy día? Porque siento que hay que hacerlo y hay que aclarar las cosas de frente y no dar malos entendidos”. Y comienza: “A mí me llama (por teléfono) Francisco Javier Errázuriz, a quien no había conocido nunca. No tenía idea quién era. Sabía que había sido candidato presidencial en contra de Büchi y del pinochetismo y era odiado por la derecha chilena, porque era un candidato de centro progresista, quien funda la Unión de Centro Centro Progresista, un partido bien extraño y que pone en jaque a la derecha, dejándolos absolutamente fuera de la línea y ante el cual terminan perdiendo las elecciones presidenciales. Me parecía un personaje divertido. Eso era todo lo que sabía de él”. “Entonces voy y doy una entrevista en CNN con Christian Pino y él (Errázuriz) ve esta entrevista y queda medio maravillado conmigo, por mi capacidad locuaz, por mi historia, por mi emprendimiento. Me llama un día y conversamos largamente sobre cómo hacer los nuevos medios de comunicación. Él estaba interesado en hacer un nuevo medio de comunicación. Yo le dije que tenía el mío. Me pregunto si lo vendía y le dije que no, que era mi proyecto.” “Y después empiezo a ver toda una campaña comunicacional en su contra, que hoy día ya queda demostrado por los propios hechos (…) El tema de los paraguayos es un montaje y hoy lo puedo decir con todas sus letras”, puntualiza Mery con seguridad. “Un montaje. Donde participa el programa Contacto y Emilio Sutherland, que son como asesinos a sueldo que andan detrás de ciertas figuras. Acuérdate lo que le hicieron a Lavandero. Acuérdate lo que hicieron con el caso Unitas, cuando tapan toda una red de pedofilia donde participan marinos norteamericanos, fiscales de la Quinta Región y gente de la PDI.” ¿Por qué destruir la imagen de Francisco Javier Errázuriz? El entrevistado explica con sus palabras: “Todos los tiburones, que son los grandes empresarios, buscaron a uno que no respondiera a sus lógicas empresariales, ni peor ni mejor que ellos. No era conservador, no era de derecha. Era un tipo díscolo. Siempre había hecho lo que había querido en la vida. Medio patrón de fundo también, pero con valores que tú te sorprenderías, porque él planteaba educación gratuita y pública hace 20 años atrás en la campaña presidencial. Él planteaba cosas muy liberales para su época. Yo creo que la derecha nunca se lo perdonó.” “Errázuriz me ofrece un cargo – lo inventamos entre los dos conversando – como encargado de asuntos externos del Grupo Errázuriz, que es un tremendo grupo económico. Yo lo pensé mucho, conversé con él y le pregunté todo lo que tenía que preguntarle sobre el caso de los paraguayos, y cuando me convencí de que él era 100% inocente, yo dije: ‘Me voy a jugar el pellejo hasta el final para que demostremos que es un montaje’”. Patricio Mery enlista una serie de hechos que demostrarían la tesis del montaje: “Las personas que denunciaron a Francisco Javier Errázuriz, los paraguayos, estuvieron dos días en Chile. Las personas que entraron, lo hicieron con permiso del ministro del interior, con oficios del Ministerio del Interior. Con permiso de Carmen Gloria Daneri.” “El programa Contacto fue totalmente pauteado y preparado por la ministra del Trabajo, Evelyn Matthei, de quien Francisco Javier Errázuriz nunca me quiso contar cuál era la verdad que le conocía con Piñera. Me dijo: ‘Yo conozco un secreto de Evelyn Matthei con Sebastián Piñera, que si yo lo cuento, Chile se cae a pedazos’. Y nunca me lo contó. Entonces yo por eso creo que hay una animadversión de esta ministra en contra del Grupo y Francisco Javier Errázuriz. Tanto así que él termina en un estado casi vegetal, hospitalizado, donde igual la ministra decía que era un tongo.” “Yo siempre dividí lo que era Panoramas News, del Grupo Errázuriz. Nunca he usado Panoramas News para defender al Grupo Errázuriz. Lo que hago en el grupo Errázuriz, se queda en el grupo Errázuriz. Lo que hago en Panoramas News, tiene que ver con mi trabajo y mi ética periodística, y eso nadie me lo puede cuestionar. Yo no hago lobby, no hago tráfico de influencias, no voy pidiendo favores a políticos, y por lo tanto tengo una superioridad moral y ética que la gente empieza a reconocer también, porque me he jugado el pellejo.” “Yo podría decir: ‘Me quedo con una pega tranquila, vendo el diario y para qué voy a seguir gastando plata de mi bolsillo para mantener un periódico independiente junto a mi socio. ¡Vendamos el periódico a Saieh, a quien quiera!’ Pero si hacemos eso, entregamos lo que hoy es la cabeza de playa del periodismo independiente. Porque hemos sido los únicos capaces de denunciar a Carabineros. Fíjate la denuncia contra González Jure por haber asesinado a un niño de 14 años en 1988, contra el general Pacheco por tener relaciones con casas de prostitución. El tema de las ventas fraudulentas de Carabineros a una serie de proveedores, las escuchas telefónicas ilegales. El nombramiento erróneo, falso y sobre la ley del director general de Investigaciones, Marcos Vásquez.” “No hay ningún otro periodista que haya tenido tantos cojones como nosotros para investigar los temas difíciles. Hemos estado con seguimientos, nos han amenazado, nos han golpeado y no tenemos miedo… y yo de verdad, desde un tiempo a esta parte creo que cualquier día me matan, y te lo digo honestamente. No lo digo en tono de burla ni irónicamente. Y si me llegara a pasar algo, todo el mundo sabe quiénes son los responsables: este gobierno. Porque yo le he informado todo a este gobierno, absolutamente todo. Le he dado todas las posibilidades para que saque al general González Jure, para que saque a Villalobos, para que saque a Ortega, que estuvo involucrado en la quema de droga de una comisaría, que es un corrupto. Entonces yo me pregunto, ¿hasta cuándo? Existe un cerco comunicacional para silenciar.” Hinzpeter y el gobierno de los montajes Patricio Mery indica que Chile “vive en el surrealismo”. Y destaca: “Este es el gobierno de los montajes. En el Caso Bombas, los jóvenes estuvieron casi diez meses presos teniendo dos horas de luz al día. FARC y Partido Comunista, cuando meten a Olate al baile. Los mapuches y la quema forestal, cuando estamos a punto de comprobar que fueron las propias forestales. El Caso Saif Khan, que ya es como la panacea de los montajes, donde dicen que este pobre cabro tiene trazas de explosivos, se mete el FBI y está metido el embajador norteamericano. O sea, Chile vive en una falacia permanente”. ¿Qué función tendrían los montajes o eventos de bandera falsa? El periodista explica: “Cuando tú creas un montaje, creas un escenario y al crear un escenario, creas un clima. Te explico. Si yo voy el día de mañana y mato a un carabinero, el carabinero más pobre con la historia más triste, lo que voy a lograr es que todos los carabineros se unan a través de él.” “Desde el punto de vista de la inteligencia, en Estados Unidos se desarrollaron dos conceptos: la información es poder y manipularla te da el poder, y la lógica del enemigo interno. ¿Entonces qué hacen los servicios de inteligencia? Los servicios de inteligencia construyen escenarios falsos que se muestran como realidad, a través de lo que se denomina ‘periodismo objetivo’, de periódicos que son leales a la institucionalidad.” Mery cita un ejemplo: el diario El Mercurio, encabezado por el empresario Agustín Edwards Eastman. “El Mercurio fue financiado por la CIA. Todo el mundo sabe que Edwards se fue a hablar con Nixon, que trajo plata, que financió el golpe de Estado, que después Pinochet le prestó plata. Todo el mundo lo sabe, pero nadie dice nada. Edwards es un criminal de guerra, es un criminal de lesa humanidad. Él hizo los peores titulares. Las peores violaciones a los DDHH las amparó Agustín Edwards a través de su periódico, que todo el mundo lee y que la gente de izquierda hace cola por salir en él. Qué chiste.” “Lo que ellos hacen es crear escenarios que justifiquen sus políticas de represión y de miedo, con la lógica del enemigo interno”, sentencia el comunicador. “Durante Pinochet eran los terroristas, ahora son los mapuches. El líder de la CAM tiene 25 años de presidio por quemar predios. ¿Cuánto pasó en la cárcel el asesino de Manuel Gutiérrez, el sargento Millacura? ¿Cuántos años ha pasado en la cárcel Agustín Edwards? Chile vive en un mundo mágico.” En su relato, el periodista saca a colación el testimonio de un ex agente de la Central Nacional de Informaciones (CNI), llamado Temístocles Gajardo, quien denuncia haber sido víctima de un montaje, preparado por sus propios compañeros, en el año 1986. La investigación fue subida recientemente a Panoramas News. “Es terrible lo que nosotros comprobamos”, expresa Patricio. “Un guardia de Pinochet y Merino es atacado por un convoy del Ejército. Tuvieron 802 impactos de bala. Su familia quedó herida. ¿Y para qué trataban de matar a un guardia de Pinochet? Para justificar la continuidad de la dictadura, para decir que aquí existía terrorismo. Esa es una noticia que debería ser escándalo nacional y los periodistas son cómplices de este silencio. Son una tropa de maricones, porque al final lo que ellos hacen con su silencio es encubrir estos delitos.” “Pero la gente no es tonta. La gente ya está prefiriendo Panoramas News, que es un diario independiente y pluralista. Está prefiriendo los sitios web, enterarse por el Twitter, enterarse por el Facebook, porque ya no les cree a los medios de comunicación. Saben que ellos participan y que son cómplices. Los de izquierda, los de derecha, los de la Concertación, los progresistas, los no progresistas, los que viven en Vitacura, en Pudahuel, quienes sean, saben que ellos terminan siendo cómplices de la mantención de este sistema. Y este sistema se mantiene sobre la base de la mentira. Y por lo tanto, cuando aparece la verdad, ésta puede destruir el mensaje completo.” El enigma de CIPER Consultado sobre el Centro de Investigación Periodística (CIPER), medio que ha sido cuestionado por sus vínculos con el Grupo Copesa y su alianza con la Fundación Ford y la Open Society Foundation de George Soros, el entrevistado expresa: “CIPER para mí es un enigma”. “Primero, me cuesta creer que un empresario (Álvaro Saieh) con intereses macroeconómicos, vaya a ponerle lucas a un centro de investigación periodística”, comienza. “Yo creo que es más un centro de acopio de información. Yo creo que tiene nexos con Estados Unidos. No me atrevo a decir con la CIA, porque no tengo pruebas, pero sí con la Fundación Rockefeller o la Fundación Ford, que en otras oportunidades ya han financiado este tipo de periodismo, que está como al límite.” “Fíjate que cuando yo tenía la querella de Eduardo Gordon en mi contra, nosotros habíamos hecho toda una investigación. Habíamos denunciado que él tenía una amante, los casos de corrupción, las escuchas telefónicas ilegales, todo lo que recaía en Gordon, éste no termina saliendo por eso. Gordon termina saliendo por una notita de CIPER donde se muestra un parte falsificado. ¿No te parece que es parte de algo? Queda Aquiles Blu como chivo expiatorio y quedan ellos (CIPER) como los paladines de la justicia, cuando al final toda la pega que habían hecho otros periodistas queda a un lado.” “Me acuerdo de un tremendo reportaje que había hecho Chilevisión también, donde Gordon salía muy cuestionado, y no pasó nada. Entonces yo creo que CIPER cumple una doble función. Cumple como la función de ser el agente de validación del sistema a través de esta supuesta figura de investigación periodística.” Y revela: “Yo estoy investigando hoy a uno de sus periodistas, que es Gustavo Villarubia. Que no sé quién es. No tiene título de periodista, aparece con nacionalidad uruguaya-española, ha estado en Afganistán, en Irak, en Pakistán (…) Investigó en Contacto el caso Unitas, donde los marinos norteamericanos violaron a niñas menores de edad. Quedó todo calificado en el proceso de la operación de pedofilia en la Quinta Región, donde estaban involucrados fiscales y miembros de la PDI. ¿Y no salió mencionado ninguno en el reportaje? Protegió a los marinos norteamericanos. ¿No te parece sospechoso? A mí me parece muy sospechoso y tengo todo el derecho a sospechar. Perfectamente podría ser un agente del gobierno de Estados Unidos, pagado para entregar información”. “Creo que CIPER trabaja a pedido de los grandes intereses económicos. Intereses que ni tú ni yo vamos a conocer nunca, y que tienen que ver con un proceso más de inteligencia. Yo dudo de la idoneidad de CIPER. Lo digo con harta responsabilidad, porque yo sé que hay mucha gente que los admira, que cree que son como los paladines de la justicia. Me voy a comprar ese cuento cuando investiguen a sus propios jefes, cuando investiguen a la Fundación Ford o a la Fundación Rockefeller, cuando hablen en contra de Estados Unidos, cuando hagan una nota contra la CIA. Capaz que ahora que lean la entrevista lo hagan, pero bueno, ya están pauteados por mí, no por una cosa de ellos. No confío en ellos y me dan mala espina por olfato, que es una de las cosas que el periodista debería tener siempre desarrollado.” Libertad de prensa en peligro
En cuanto al futuro de la libertad de prensa en Chile, Patricio Mery expresa molestia por la falta de coherencia de las autoridades. “Ayer vi en el Twitter del presidente, ‘Viva la libertad de prensa’”, señala. “¿Cuál libertad de prensa, si bajamos 47 puntos en la categoría según Reporteros Sin Fronteras? ¿Qué libertad de prensa, si más de 20 periodistas han sido detenidos en las marchas? ¿De qué libertad de prensa me hablan, si aquí la mayor inversión publicitaria del Estado se va para El Mercurio y Copesa? Panoramas News es más de libre mercado que ellos. Yo creo en la competencia porque creo en la igualdad. Pero para que exista competencia, yo tengo que tener las mismas herramientas. Aunque insisto, yo no soy de la generación de los llorones, soy de la generación del salir adelante. Y creo que salí adelante.” “Chile le tiene miedo a la verdad. Si el día de mañana me entrevistara Televisión Nacional y yo voy con todos los documentos que comprueban que González Jure participó en el asesinato de un niño, ¿qué tiene que hacer ese oficial al otro día? Renunciar. Entonces aquí existe impunidad absoluta”. “En el caso de las escuchas telefónicas, lo que hace el Alto Mando de Carabineros es tener información para usarla contra los políticos, fiscales, profesionales, abogados, escuchándolos a todos. Si yo tengo información y te escucho con tu amante o que te tiraste a una cabra chica, yo voy y te lo digo: ‘Fiscal Nacional, sabe que tengo información sobre usted. Si quiere nos ayuda’. Imagínate si Hinzpeter realmente le pidió a Bruno Vilalobos, el director de Inteligencia, que interviniera el teléfono del embajador de Pakistán. ¿Qué deuda tiene Hinzpeter con ese Carabinero? Imagínate si Villalobos hablara. ¡Lo va a proteger por siempre!” “Yo he hablado con periodistas y les he mostrado estos casos. Me dicen ‘oye, qué interesante, qué entretenido’. ¿Pero por qué no sale en la televisión? ¿Por qué hay un cerco comunicacional? (…) Yo tengo dos querellas por injuria por parte del general Pacheco y el general González Jure. ¿Tú crees que el Colegio de Periodistas o algún medio de comunicación se ha interesado en el tema? ¡De Inglaterra me llamaron para contar mi caso! De Bélgica, de la Comunidad Europea, de Amnistía Internacional. Pero de Chile no, porque vivimos en un surrealismo mágico, en donde los que somos capaces de atrevernos a romper la estructura somos ninguneados y somos silenciados y es como que no existiéramos.” “Sin garantías no puede haber prensa libre y democrática”, sostiene el entrevistado. “Sin que se escuchen todas las voces, no puede existir prensa libre y democrática. Nosotros estamos en falta. Chile está en falta, porque aquí se manipula la información, se controla y también se censura. O están todos coludidos, o son todos una manga de maricones, o están todos bailando al ritmo de los poderosos. No tengo otra respuesta.” ¿Qué dice Mery a las nuevas generaciones del periodismo? “El mensaje es uno sólo”, indica, “si quieren ser periodistas de verdad, tienen que estar dispuestos a entregar su vida. Ese es el precio, y no soy dramático. Pepe Carrasco entregó su vida; Fray Camilo Henríquez a su modo; Luis Mesa Bell, primer mártir del periodismo chileno que investigó paradójicamente un caso de carabineros y termina siendo asesinado a palos.” En una columna, Antonio Gil comparó recientemente la vida de Mesa Bell y Mery Bell. “Gil hace una comparación de los apellidos”, contesta el periodista aludido. “Por la similitud de los casos que yo investigo y los que investigaba Luis Bell. Espero no terminar como él. Ni preso ni muerto. No tengo ganas de morirme, pero si el día de mañana estos caballeros quieren pasar a la fase dos y asesinarme, que lo hagan.” A la pregunta de si teme por su vida, Patricio es tajante: “No tengo miedo. Pienso que puede ocurrir porque ya lo han hecho, porque estoy con seguimiento permanente, por el tema de los teléfonos (intervenidos). Sé que me están investigando. Hay personas desde adentro que son leales al periodismo independiente y que nos han entregado información clave sobre nosotros. Hay personas en Carabineros que todavía son republicanos, que aún creen en la Constitución y están dispuestos a desbancar a las mafias.” “Yo no temo por mi vida, pero sí creo que ya crucé el camino. La pelea contra González Jure, la pelea contra Pacheco, la pelea contra los Altos Mandos de Carabineros, la PDI, la corrupción y los políticos corruptos, es de vida o muerte. No hay otra alternativa. Cuando entras a estudiar periodismo, debes tomar una opción: te dedicas a ser periodista, cueste lo que cueste, arriesgues lo que arriesgues y asumes ser un valiente, y también un loco o un mártir, o te dedicas a otra cosa. Jugarse el pellejo es el precio.” “Ahora, yo confío en las nuevas generaciones. Creo que hay cabros que se están sacando el pellejo y que gracias a lo que nosotros estamos haciendo vamos a dejar un precedente y va a marcar la bandera. Vamos a decir, ‘esto pasó en Chile’. Estamos construyendo la historia de este país a través de nuestros reportajes, que atacan a todos, atacan a quien se lo merece.” “Si el día de mañana, el Partido Comunista, con el cual tengo las mejores relaciones, y me he sentido más protegido por ellos que por el Partido Socialista, o alguno de sus dirigentes se manda una embarrada, yo voy a ser el primero en pegarle un palo en la cabeza”, finaliza. “Y no me va a temblar la mano.”
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