Nuevos
documentos secretos de la dictadura, revelaron que en dictadura, los organismos
de inteligencia de Pinochet espiaron durante años a niños chilenos en sus
propios colegios. El informe enviado por la CNI (Central Nacional de Informaciones)
al Ministerio de Educación en mayo de 1983 señala: “Iván Salinas organiza y
agita a los alumnos, mandándolos a las ‘marchas del hambre’, realizadas en el
centro de Santiago Salinas figura junto a los nombres de decenas de otros
jóvenes, como Diego Meza o Víctor Osorio (actual presidente del partido
Izquierda Cristiana, IC), en 30.000 archivos secretos del régimen a los que
accedió el periodista Mauricio Weibel, de la agencia DPA.
Las fichas con
antecedentes políticos de menores de edad y docentes elaboradas por la CNI
llegaron a las oficinas de los ministros de la dictadura con las cartas
firmadas por los delatores, en su mayoría profesores y apoderados que le
escribían directo a Augusto Pinochet.
De
hecho, la propia esposa del dictador, Lucía Hiriart, participó en este circuito
de vigilancia, alertando por escrito, en 1988, de la supuesta simpatía
socialista del funcionario ministerial Humberto Vera en la Región de Magallanes.
CHADWICK,
MELERO Y CARDEMIL CÓMPLICES.
Según
señalan los documentos, Pinochet trató también de formar una juventud leal a su
régimen, esfuerzo para el que contó con el apoyo de la policía secreta y
civiles, entre ellos el actual ministro del Interior, Andrés Chadwick, y el ex
presidente de la Cámara de Diputados y actual timonel UDI, Patricio Melero. En
estos múltiples “encuentros escolares”, además del propio Pinochet, los
oradores en la cita fueron Jaime Guzmán, el hoy ministro Chadwick y el diputado
Melero, todos miembros fundadores de la Unión Demócrata Independiente. El
documento señala textual:
“El
esfuerzo por levantar un estudiantado leal, del cual existe registro hasta las
postrimerías del régimen, fue apoyado además con el adoctrinamiento de los
hijos de las autoridades y de los propios funcionarios, como consta en diversos
oficios secretos. Los hijos de altos funcionarios de la dictadura, recibieron,
de hecho, cursos periódicos sobre “Seguridad Nacional” y “Doctrinas
Totalitarias”, entre otros. Además cursaron materias como seguridad nacional,
geopolítica, guerra nuclear, poder naval, teología de la liberación y estudio
crítico del marxismo, como consta en los oficios secretos”
Por
si esto fuera poco, los asesinos y torturadores de la CNI “visaban” la
contratación de docentes. Entre 1975 y 1990, por orden escrita de Pinochet,
refrendada en sucesivos oficios, la policía secreta quedó además a cargo de
supervisar toda contratación en el Estado, incluida la de profesores. El
control sobre el magisterio fue total y el propio Ministerio del Interior pidió
a veces el pronunciamiento de Educación sobre la expulsión de docentes
opositores a través del subsecretadel Interior, el hoy diputado y candidato a
senador de Renovación Nacional Alberto Cardemil.
Por
ejemplo, Cardemil demandó en el oficio reservado 2464 del 14 de julio de 1986
definir medidas contra el profesor Benjamín Sierra de la Fuente del liceo
fiscal A-2 de Arica. Todas estas operaciones ocurrieron en paralelo a una
masiva venta o traspaso de los colegios públicos a municipios o privados,
incluso a bajo precio como alentó un oficio secreto del 26 de marzo de 1986,
proceso que devino en un jibarización del papel del Estado en la Educación, que
hoy es cuestionada con fuerza por el movimiento estudiantil.
CHADWICK,
MINISTRO DE GOBIERNO
MELERO,
PRESIDENTE DE LA UDI “POPULAR”
CARDEMIL,
CANDIDATO A SENADOR
AHÍ
TIENEN A LA DERECHA CHILENA
No hay comentarios:
Publicar un comentario